Los suelos son la base de la vida en el planeta. Son unos cuantos centímetros debajo de nuestros pies,  de los cuales depende la generación del alimento y la vida como la conocemos.

«hay más organismos vivos en una cucharada de suelo que personas en la Tierra» -FAO

No por vivir en la ciudad, podemos dejar de estar conscientes de una realidad importante: el excesivo uso de plaguicidas y fertilizantes químicos en todo el mundo, (donde Costa Rica lleva la delantera desafortunadamente),  ha dado como resultado suelos agotados, prácticamente sin vida, contaminación de los recursos naturales, daños en la salud humana y altos costos para los agricultores.  El manejo industrializado de los suelos agrícolas son parte de los responsables directos del calentamiento global.

En otras palabras, en las prácticas agrícolas está gran parte del futuro de nuestro planeta.

Podemos comprender entonces, que en la elección que hagamos los consumidores sobre los productos que decidimos llevar a nuestra mesa, está gran parte del futuro de nuestro planeta.

Los consumidores no decidimos cómo producir los alimentos, pero sí decidimos cuál alimento comprar, y eso determina a cuál industria apoyamos para el futuro. Si apoyamos productos de agricultura sostenible, ecológica, regenerativa u orgánica, estaremos apoyando entonces la generación de agricultores que han apostado por un camino diferente, que tiene como prioridad la sostenibilidad ambiental y la salud humana.

No se trata solamente de no envenenarnos con agroquímicos, que ya de por sí es importante. Hablamos de algo todavía más serio: la sostenibilidad de la producción de alimento y la vida en el planeta.

La tierra saludable es capaz de capturar enormes volúmenes de gases de efecto invernadero (en lugar de liberarlos), su manejo responsable puede recuperar nuestras fuentes de agua dulce y recuperar la fertilidad y la capacidad del suelo para producir alimento y resguardo. En otra palabras, el manejo que hagamos de nuestro suelo nos puede salvar del colapso climático total que se avecina. (Si le interesa el tema, recomendamos ver el documental Kiss The Ground, en Netflix).

En Mercato, nos dedicamos a apoyar a más de 60 productores sostenibles en todo el país, la mayoría orgánicos certificados, en segundo lugar fincas no certificadas, pero con prácticas agro-ecológicas, 100% libres de pesticidas, también proyectos de ganadería responsable, donde se crían animales libres, sin hormonas ni antibióticos, por último, cocinas y pequeños emprendimientos que ofrecen alimentos con insumos y prácticas sostenibles. Nuestro trabajo es buscar, escoger, promover y llevar sus productos de la forma más conveniente y sostenible posible, a la casa de miles de consumidores en todo el GAM, conscientes de la capacidad de los alimentos para sanar la salud y el planeta; conscientes del poder de elegir lo que consumimos.

Cada compra que usted hace en Mercato tiene impacto: lleva salud a su casa, regeneración y desarrollo humano en el campo y trabajo con propósito a las familias de cientos de personas que se levantan cada día para trabajar con el propósito de mejorar el mundo en que vivimos.