El ajo criollo se ha ido perdiendo en la cultura costarricense. En los supermercados vemos los ajos importados de China, producidos con pesticidas, con una enorme huella de carbono por la emisión de hidrocarburos y energía que han necesitado para recorrer el mundo para llegar aquí. Aún así, son muchas veces más baratos y más grandes que el ajo criollo tradicional. Por eso el ajo chino se puede encontrar hoy día prácticamente en todas las casas de los ticos.
Bueno, este ajo es el ajo tradicional criollo costarricense. Es pequeñito, difícil de pelar en comparación al homólogo oriental. Sin embargo, nadie le gana a este ajo en sabor y aroma. Con un dientito de este ajo, se logra el sabor que no se logra con todo un ajo importado. Pruébelo y consúmalo con tranquilidad porque es libre de pesticidas, producido en fincas orgánicas y libres de pesticidas que regeneran el suelo y el ambiente, tiene poco tiempo de haber sido cosechado y solamente recorrió unos kilómetros para llegar a su casa.